Para pensar un poco…

Muchas veces en la vida, esperamos demasiado de los demás y no queremos hacernos a la idea de que no son perfectos y que el amor y/o la amistad deben pasar por encima de esas faltas, para hacerse más sólidos. Para ser verdaderos y no la simple consecuencia de estar con quien lo paso muy bien.

He aquí un texto que ayuda a reflexionar un poco sobre el tema…

Por lo que se refiere a las faltas e imperfecciones de nuestro prójimo, es bueno considerar -al igual que ocurre con las demás contrariedades- que en “en el mal no sólo hay mal”. La conducta cuestionable de quienes nos rodean y que constituyen para nosotros un motivo de sufrimiento, no es totalmente negativa, sino que ofrece ciertos beneficios.

En nosotros está sólidamente enraizada la tendencia a buscar en nuestra relación con los demás lo que puede llenar nuestras carencias sobre todo las carencias de nuestra infancia. Las imperfecciones de los otros y las decepciones que nos causan nos obligan a esforzarnos por amarlos con un amor verdadero y a establecer con ellos una relación que no se limite a la búsqueda inconsciente de satisfacer nuestras propias necesidades, sino que tienda a hacerse pura y desinteresada como el mismo amor divino: sed perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto.

Por otro lado, los defectos nos ayudan también a no esperar del prójimo la felicidad, la plenitud o la realización que sólo podemos esperar en Dios, quien nos invita a “enraizarnos” en Él. A veces es, tras una decepción en la relación con alguien de quien esperamos mucho (seguramente demasiado) como aprendemos a profundizar en la oración y en la intimidad con Dios, a esperar de Él esa plenitud, esa paz y esa seguridad que únicamente su amor infinito puede garantizarnos. Cuando los demás nos defraudan, nos hacen pasar de un amor “idólatra” (un amor que espera demasiado) a un amor realista y libre y, por lo tanto, finalmente dichoso. El amor romántico siempre se verá amenazado por las decepciones; la caridad jamás, porque no busca su propio interés.

Philippe, Jacques. La libertado interior. Patmos. 7ª Edición. Madrid. 2005. pp. 75-76.

Acerca de egosti

Abogado litigante, miembro de la firma Arrambide&Villarreal; especializado en materia Fiscal y Administrativa. Del año 2000 al 2012 trabajó en el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, diez años como Secretario de Acuerdos de Sala Regional.
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